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En un entorno donde la gestión eficiente de los residuos es una prioridad, el NIMA es una herramienta clave. En este artículo, te contamos qué es el NIMA, cuáles son los requisitos para obtenerlo y cómo puedes utilizarlo. Acompáñanos a descubrir cómo se integra el NIMA en el ecosistema de gestión de residuos.
El NIMA, o número de identificación medioambiental, es un código único a nivel nacional utilizado para identificar los centros e instalaciones dedicados a la producción y al manejo de residuos que deben ser registrados de acuerdo con la legislación sobre residuos.
Esto también incluye aquellos centros que, aunque no están obligados a registrarse en términos de gestión de residuos, sí que deben organizar la gestión de sus desechos, cuyo transporte necesita una notificación previa.
El NIMA es un requisito en todas las comunidades autónomas de España, siendo necesario que los centros e instalaciones se inscriban en la administración correspondiente dentro de su comunidad autónoma específica.
A pesar de que el NIMA está operativo en todas las regiones, el País Vasco presenta particularidades en el procedimiento de obtención, diferenciándose en la forma en la que se gestiona y se adquiere el código.
El NIMA tiene como propósito principal la identificación precisa de centros e instalaciones en la documentación asociada al control de producción y manejo de residuos.
Este código único es como el DNI del centro en materia de gestión de residuos. Por eso, resulta esencial para reconocer cada centro. El NIMA juega un papel crucial en la tramitación electrónica de diversos documentos importantes, tales como:
El código NIMA se compone de diez dígitos, donde los dos primeros dígitos representan el código del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondiente a la provincia, y los ocho dígitos restantes son números asignados específicamente por la Comunidad Autónoma.
Para solicitar el NIMA, es imprescindible cumplir con ciertos requisitos, que pueden variar dependiendo de la comunidad autónoma donde se realice la petición.
Cumplidos todos ellos, la solicitud del número se realiza a través de la plataforma electrónica de registro de la comunidad autónoma correspondiente. Posteriormente, se lleva a cabo una revisión para asegurar que todo cumple con la normativa. Si el resultado es positivo, se asigna el número NIMA y se procede a incluir a la empresa en el Registro Estatal de Productores de Residuos.
El código NIMA se estructura mediante una secuencia numérica de diez dígitos.
Esta codificación permite una identificación precisa y estandarizada de los centros e instalaciones a nivel nacional, facilitando su registro y seguimiento en materia de gestión de residuos.
El NIMA se asigna tanto a los centros productores de residuos como a las instalaciones autorizadas para su tratamiento. A nivel nacional, cualquier centro o instalación que se dedique a la producción o gestión de residuos debe ser identificado de manera inequívoca con un NIMA, conforme a lo dispuesto en la Ley 22/2011, de 28 de julio, sobre residuos y suelos contaminados.
Por tanto, obtener un NIMA es un requisito indispensable para la identificación y registro de entidades dedicadas al tratamiento de residuos, pero es importante destacar que tener un NIMA por sí solo no constituye una autorización para el tratamiento de residuos. La asignación de este código es un paso administrativo necesario que debe complementarse con las autorizaciones y permisos específicos para realizar efectivamente actividades de gestión y tratamiento de residuos conforme a la normativa aplicable.
Contar con un NIMA es obligatorio en varias situaciones que involucran la producción y gestión de residuos en centros o empresas:
Por lo tanto, la única circunstancia en la que no es necesario disponer de un NIMA es cuando la entidad no genera residuos peligrosos y la cantidad de residuos no peligrosos producidos no excede las 1000 toneladas anuales.
Sin embargo, incluso en situaciones donde no se cumplen estos criterios de producción de residuos, si la normativa exige el NIMA para la identificación de la actividad productora, será obligatorio solicitarlo.
Como has visto, el NIMA es un elemento indispensable en la gestión ambiental. El eje central en la identificación y el registro de los productores y gestores de residuos. Por eso, en nuestro software online de gestión de residuos se puede introducir este dato identificador para cumplir con la normativa vigente. Te explicamos, brevemente, cómo hacerlo.
Primero, deberemos crear una EMA (Entidad Medio Ambiental). Para ello, debemos acceder a nuestra plataforma y desplegar el menú “Ficheros”. Posteriormente, iremos a “Entidades medioambientales”:
Tras rellenar los datos de la EMA con todos los campos necesarios (denominación, NIF, forma fiscal, etc.), la plataforma creará un centro de trabajo con el mismo nombre que su EMA y cuyos datos podremos editar posteriormente.
Dentro de la ficha del centro generado, encontraremos un desplegable con varias opciones entre las que se encuentra la que estamos buscando: Datos medioambientales. Es en esta sección donde podremos introducir el NIMA propio del centro.
En nuestra pantalla de configuración, es tan simple como hacer el clic en “Editar datos medioambientales”:
En ese momento, aparecerá un modal con los campos a cumplimentar entre los que se encuentra el NIMA:
Una vez introducido tanto el propio NIMA como el resto de campos necesarios, le damos a “Aceptar” y ya tendremos la sección de “Datos medioambientales” debidamente cumplimentada.
Como ves, es muy fácil registrar este número de identificación dentro de nuestra plataforma. Si quieres conocer más funcionalidades de la misma, te animamos a contactar con nosotros. Podrás disponer de una demo gratuita que te permitirá conocer mejor nuestra herramienta de gestión de residuos.
