El inicio de un nuevo año es un buen momento para repasar los procesos de gestión de la empresa y mejorar la productividad. También podemos hacer una revisión del estado de nuestro negocio en relación a ventas, proveedores y clientes para aumentar nuestra facturación. Sigue nuestros consejos para empezar el año con buenos propósitos y hacer crecer tu empresa.
Ganar efectividad en las gestiones
Las gestiones fiscales, facturación y comunicaciones con el cliente suelen ser los procesos que ocupan el mayor tiempo de las empresas hoy en día. Para agilizar este tipo de gestiones es necesario revisar qué estamos haciendo en la actualidad y automatizar todas las tareas que podamos:
- Debemos hacer una revisión de tareas por departamento (con una simple entrevista a los responsables puede bastar) y determinar cuáles se podrían eliminar o automatizar.
- Trabajar con objetivos puede ayudar al personal de la empresa a ser más productivo. Cuando analicemos las tareas, tenemos que pensar si se pueden englobar en listas de objetivos recurrentes o no. Por ejemplo: todos los viernes se realiza un determinado informe o se llama a todos los clientes pendientes de pagar.
- Utilizar programas de gestión para la facturación y contabilidad pueden ayudar a la gestión, pero es necesario comprobar que se estén usando correctamente.
- Evita que se acumulen tareas: por ejemplo cuando se reciban facturas por correo electrónico se deben introducir inmediatamente en el programa de facturación.
- Evita trabajar por duplicado o en formatos distintos: siguiendo el ejemplo de las facturas, en el caso de recibirlas en papel es mejor digitalizarlas al momento y guardarlas en sistema de facturación o contabilidad. Puedes incluso solicitar a tus proveedores y clientes que las envíen siempre por correo electrónico.
Mejorar la rentabilidad del negocio
Al repasar las gestiones de la empresa surgirán también muchos aspectos relacionados con el funcionamiento del negocio que no debemos pasar por alto. Es un buen momento también para analizar la estrategia de la empresa en relación a ventas, clientes, proveedores e incluso la competencia.
En este sentido, podemos hacer un análisis rápido y anotar los puntos de mejora para este año:
- Ventas: es necesario analizar nuestras ventas para la estrategia del nuevo año. ¿Qué productos se vendieron más y debemos seguir promocionando? ¿Qué producto no tiene demanda y podemos retirar o promocionar de manera distinta?
- Clientes: de la mano de las ventas, debemos analizar qué clientes compran qué tipo de producto. Es importante también analizar si hay cambios en los hábitos de los clientes: ¿Están comprando menos? ¿Por qué? ¿Necesitan una nueva plataforma de venta o servicio?
- Proveedores: a los proveedores se les tiene que cuidar tanto como a los clientes. No solo debemos continuar la buena relación sino comprobar que todo funcione como lo previsto (por ejemplo: no perdonar retrasos). Puede que nuestra calidad o ventas se vean afectadas por algún cambio en los suministros o proveedores.
- Competencia: en paralelo a la revisión de nuestro negocio, es importante también que miremos lo que está haciendo la competencia en relación a precios, productos, marketing, etc. Este es un ejercicio que deberíamos hacer asiduamente ya que nos dará inspiración para enfocar nuestro negocio.
Esperamos que estas buenas prácticas ayuden a aumentar la productividad y ventas de vuestra empresa.
